Es artista desde su etapa en el coro de San Luis de los Franceses.  Ahora sigue cantando en la ducha, conduciendo y hasta en la cola del supermercado. Belinda Washington confiesa que no puede pasar ni un solo día sin música porque la necesita como el aire y reconoce que le aporta una dosis extra de alegría. La semana que viene se sube al escenario de la plaza para compartirla y contagiarla. Con 54 veranos recién cumplidos.  Porque hoy es su cumpleaños ¡Felicidades!

Nada más conocer el programa de fiestas patronales y ver que volvía a ser una de sus protagonistas me propuse conversar con ella un rato. Esta vez no le habían llamado para dar el pregón (lo ha pronunciado dos veces pero como no hay dos sin tres…) sino para cantar con The Washington Band, un grupo que nacía a raíz de una felicitación navideña poco convencional. Para hacer llegar sus mejores deseos a familia y amigos a Belinda Washington se le ocurrió cantar y el éxito fue rotundo. Tanto que le animaron a montar un grupo y grabar un disco. Lo primero es una realidad porque se han cruzado en su camino músicos que, como ella, creen en los sueños. Lo segundo no pero todo se andará. Seguro.

Antes de acabar sus estudios en el colegio que antes fue fábrica de chocolate y de salir con su pandilla por Batucada, El Norte, Funky y El caballo de hierro, berreaba intentando imitar voces tan dispares como las de Ana Torroja, Whitney Houston o María Callas. Lo tenía tan claro que años después se presentó al casting para el programa de Jesús Hermida y todos creyeron que era cantante de profesión. Belinda suelta que aquello debió ser en el paleolítico superior y que se atrevió con Cabaret de Liza Minelli. Nos reímos, claro.

Lleva más de 25 años trabajando en televisión como presentadora y actriz y ha intervenido en obras de teatro y musicales. Además sigue recibiendo clases de canto e interpretación, grabando series y participando en programas como Tu Cara me Suena. Este verano no ha tenido reparo en convertirse, por necesidades del guion, en Kim Kardashian o el expresidente Felipe González en Me lo Dices o Me lo Cantas (Telecinco) para colaborar con causas solidarias. Es inasequible al desaliento, convencida de que todo se puede con trabajo, trabajo y trabajo. Hasta poner voz a un cuarteto de jazz sin saber leer una partitura musical. “Creo mucho en el esfuerzo personal y me motiva todo lo que relacionado con la creatividad y el mundo de las artes”.

Y no sólo las escénicas ¿Cómo va tu faceta de pintora?

Bueno… estoy tratando de aprender mucho. Estos últimos años he realizado diferentes cursos y he roto mucho papel tratando de encontrar mi estilo. La acuarela me encanta pero también el carboncillo tiene algo de mágico. También le doy al óleo y me he atrevido con formatos grandes. Lo que me da respeto es el acrílico. A la hora crear soy una nómada; no lo hago en un espacio concreto. Así me siento más libre. Hasta para estar en casa y salir corriendo con el caballete y mis pinceles a pintar del natural.

Le pregunto por las fuentes de inspiración y me contesta que depende. Unas veces deja volar la imaginación; que el papel hable y el agua se mueva. Otras observa el paisaje y lo reproduce a su manera disfrutando de la ausencia de ruido. Quizás por eso la muestra que inaugura este viernes en Madrid, en la galería CN (Lagasca, 95), se titula SILENCIOS. En octubre otra selección de sus trabajos viajará a Málaga para exhibirse, por segundo año consecutivo, en mahatma.

¿Te gustaría exponer en alguno de los espacios culturales de Pozuelo?

Me encantaría. Aunque no nací aquí es mi ciudad y no hay nada como ser profeta en tu tierra. La fruta la compro en el pueblo y si no tengo función o bolo suelo acudir al MIRA Teatro a ver algún espectáculo. El curso pasado me apunté a un taller de costura en su espacio cultural donde había hecho otros de cocina y voy a un gimnasio de Pozuelo. Creo que no ha perdido su esencia de pueblo y eso me gusta; lo único que no llevo bien son los atascos para llegar al centro.

No es extraño que le moleste lo de estar parada dentro de un coche. Disfruta de cada paso que da por pequeño que sea y se siente agradecida. Antes de despedirnos susurra que no hay que preocuparse sino ocuparse de uno mismo y olvidar actitudes y pensamientos negativos. Una buena manera de hacerlo es pasarse el próximo martes 5 de septiembre, a eso de las diez y media de la noche, por la plaza del Padre Vallet.

Asunción Mateos Villar

En vivo y en directo. Sala Clamores. Madrid

Con Miriam Díaz-Aroca en Insatisfechas

THE WASHINGTON BAND

Hace un par de años la actriz buscaba gente con corazón que sintiera auténtica pasión por la música y estuviera dispuesta a unirse a su aventura. Llevaba toda la vida recibiendo clases decanto y soñando con tener su banda.  Hasta que aparecieron ellos y el sueño se hizo realidad. The Washington Band es un cuarteto de jazz formado por Belinda Washington y prestigiosos músicos ¿Qué quiénes son ellos?

SAMUEL HERRUZO (Piano y Saxofón) nace en Bilbao en 1990. Comienza sus estudios de piano a los cinco años y a los ocho los continua en el Conservatorio Profesional de Música de Madrid en la especialidad de saxofón. Tras varios años de formación moderna ha compartido escenario con grupos como Iguana Tango o Melocos.

CARLOS MAESO (Bajo eléctrico y guitarra) ha realizado cursos con algunos de los bajistas más prestigiosos de España. Su carrera profesional como músico se inicia a los catorce años y desde entonces ha participado en giras, seminarios y clases magistrales. Actualmente trabaja como músico -de directo y de sesión- y compagina su profesión con su faceta de docente.

ENRIQUE “KIKI” FERRER (Batería) es uno de los percusionistas cubanos más relevantes de su generación. Tras graduarse en la ENA con la máxima calificación comienza a relacionarse con los artistas de la isla. Desde entonces ha desarrollado una extensa carrera asociada a nombres como Alain Pérez, Antonio Carmona, Concha Buika, Diego “El Cigala” o Jorge Drexler.