La parroquia de la Asunción de Nuestra Señora es la más antigua de Pozuelo de Alarcón y única en el pueblo hasta 1935. Ese año fue elevada a categoría de parroquia la Iglesia de El Carmen en el barrio de la Estación. Aunque no tenemos datos exactos del año de su construcción si existen documentos del primer tercio del siglo XVI y sabemos que debía de contar con buenos ingresos porque el 17 de mayo de 1564 el párroco de la iglesia, Juan Jordán, y su mayordomo contrataron al escultor Francisco Giralte y al pintor Diego de Urbina -dos de los mejores artistas de la época- para que hicieran un retablo destinado al altar mayor, en el plazo de cuatro años, pagando a cuenta 20.000 maravedíes en reales.

La realización de la obra no se hizo en el tiempo establecido, por incumplimiento de los artistas. El contrato inicial tuvo que renovarse en varias ocasiones y su finalización se alargó hasta comienzos del siglo XVII. Quienes iniciaron la obra murieron antes de finalizarla así que fue rematada por el escultor Antón Morales. Del cuerpo del retablo que no estaba terminado se encargó el hijo de Diego de Urbina.

El antiguo retablo constaba de tres cuerpos y cinco calles y estaba coronado por un ático. En la parte alta de las calles laterales estaban las esculturas exentas de apóstoles y en la parte inferior otros santos. En las siguientes calles había seis tablas pintadas y en la parte central -más ancha que las otras- diferentes imágenes, el Expositor y el Sagrario. La obra permaneció en la parroquia de la Asunción de Nuestra Señora hasta que en 1939 la iglesia fue restaurada debido a los importantes deterioros que sufrió durante la Guerra Civil de 1936.

Pintor de la Corte

En 1914 visitó la parroquia el historiador de arte Francisco Javier Sánchez Cantón que llegó a ser director del Museo del Prado. Después de analizar el retablo constató la diferencia de calidad escultórica que existía entre el primer cuerpo (un San Pedro y un San Juan) y el resto lo que demostraba la participación de dos artistas.

Aunque en sus notas no especificó la temática de las esculturas sí lo hizo de las seis pinturas realizadas por Diego de Urbina concluyendo que se trataba del abrazo de la Puerta Dorada, el nacimiento de la Virgen, el Portal de Belén, la Adoración de los Reyes Magos, un Ecce-Homo y el Camino al Calvario. Describió los cuadros como de influencia italiana, agradable aspecto, bien dibujados y con un colorido a la altura de las de El Escorial y destacó que formaban “un conjunto importante de obras” que merecía la pena estudiar como representativas del pintor de corte Diego de Urbina.

El experto alemán

Entre 1924 y 1936 viajó varias veces a España el historiador de arte alemán Georg Weise, estudioso de la escultura renacentista y pre-barroca. También de temas  arquitectónicos españoles; especialmente de “la iglesia salón”. El templo de Pozuelo de Alarcón reunía estas características y este debió ser el motivo que le impulsó a visitar el pueblo en uno de sus viajes y a fotografiar detalles del retablo. Así  hemos podido saber que algunas columnas que han aparecido en la casa parroquial así como las esculturas y los frisos pertenecen al retablo. Al estallar la guerra civil las piezas que se encontraban en los nichos inferiores fueron quemadas en la plaza principal del pueblo pero el resto del retablo quedó intacto.

En noviembre de 1937 un reportero de guerra fotografió el interior de la iglesia y mostró los destrozos provocados por el impacto de un obús en el lateral de la cabecera. Pero también se distingue que el retablo conservaba los tres cuerpos, las cinco calles y los cuadros. En aquel momento contaba con las esculturas de San Pedro y San Pablo, un Calvario (Cristo Crucificado, La Virgen y San Juan) que coronaba el retablo y una Anunciación en la calle central. Sólo faltaban algunas imágenes en los nichos inferiores, posiblemente las que ardieron al estallido de la guerra.

Patrimonio Artístico

Al acabar la contienda, la iglesia estaba muy deteriorada y el Organismo de Regiones Devastadas la reconstruyó, reduciendo sus dimensiones y altura, lo que motivó el desmantelamiento del retablo. Desconocemos dónde fueron a parar cuerpo, cuadros e imágenes que quedaron porque, hasta el momento, no se han encontrado.

Pero no perdemos la esperanza de que algún día puedan aparecer y vuelvan a Pozuelo de Alarcón restituyendo el patrimonio histórico-artístico que le pertenece.

María Esperanza Morón

Pilar Palomo de niña

DETALLES

Fotografías de Georg Weise
Historiador alemán del siglo XX

Apóstol San Pedro

San Matías y San Bartolomé