Los mercadillos navideños de Europa se remontan a la época medieval. En ese tiempo los territorios alemanes cubrían una amplia franja del conteniente. Según la revista National Geographic el mercado de Dresde se montó por primera vez en la Nochebuena de 1434 con la excusa de reunirse en un lugar acogedor y prepararse para el duro invierno. Para la de 2023 queda poco y en un reino de papel cercano han decidido recibirla por todo lo alto. Zepol es el único lugar de la ciudad donde encontrarás -salvo cambios de última hora- un gran árbol de Navidad, pista de hielo, camioneta y carrusel. El Glühwein es lo único que corre por tu cuenta.
Dicen que la Navidad es la época del año en la que surge la magia ¿Te imaginas que el escaparate de Zepol se recreara en un espacio público de Pozuelo de Alarcón? Su conjunto de cartulina con cabaña central y casitas de blancos tejados, presidido por un gran árbol de periódico rematado con estrella, su pista de hielo con patinadores, el carrusel, la camioneta, la caravana…
Inspirada en un viaje a Berlín, Marisa ha confeccionado con la técnica de scrap que emplea para hacer tarjetas artesanas a la venta en tienda -y la colaboración de Lara- un mercado navideño típicamente europeo. Con el doble objetivo de convertir un rincón en paisaje navideño y revalidar el título. El año pasado su pueblo nevado con funicular se llevó el primer premio en el Concurso de Escaparatismo que organiza el Ayuntamiento. A ver qué pasa esta vez…
De momento, lo que sigue ocurriendo, es que Zepol se desdobla antes de Navidad. Hasta Nochebuena puedes encontrar una selección de sus libros y juegos didácticos en su caseta del Mercado del Regalo Navideño situada en el bulevar de la Avenida de Europa. Donde además, el 23 de diciembre a las cinco de la tarde, Federico Serrano, Amparo Trujillo y Manuel Barranco -tres de los nuestros- firmarán ejemplares de sus obras «Un otoño diferente», «Colibrí» y «Mil y un gatos».
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