Suele ocurrir todos los años. Cuando los operarios desmontan las luces y ya no suenan las charangas la ciudad se queda en silencio. Sin embargo, el vecindario comenta lo mejor y lo peor de las Fiestas Patronales en honor de la Virgen de la Consolación. Aunque la cartelería y el programa municipal obviaran que la semana grande de Pozuelo de Alarcón está dedicada a la Patrona y Alcaldesa de la Villa. Desde hace más de un siglo.

Podría parecer una cuestión insignificante pero el hecho de que la Virgen no haya aparecido en los programas de mano ni en los anuncios publicitarios ha sorprendido a muchos. También a esta plumilla. Tanto como los litros de agua* que han caído durante las Fiestas Patronales. Las peores tormentas han coincidido con la celebración de las actividades con mayor concurrencia. A saber. El pregón, la Quedada Generacional y el concurso de Recortes. Porque a la hora de la procesión -que este año fue en el interior de la parroquia de la Asunción de Nuestra Señora- no cayó ni una gota. Escrito esto una piensa, desde aquí arriba y ahora que no llueve, que las casualidades no existen y que quizás la Patrona estaba algo molesta.

Reflexiones extrañas aparte -a veces me ocurre- lo cierto es que este año las fiestas han sido diferentes y no sólo por culpa de una DANA anunciada hasta en los móviles. El pasacalles discurrió con normalidad hasta que llegó a la plaza Mayor y cayeron las primeras gotas que, en pocos minutos, se transformaron en un tremendo chaparrón. El caso es que allí estábamos algunos mojándonos como si tal cosa pendientes de la Alcaldesa, Paloma Tejero, cuando de repente la explanada se quedó desierta. Ni una sola peña presenció el pregón de la peña Seis y Medio. Parece ser que por un mal entendido. Creyeron que se suspendería y decidieron ponerse a cubierto. Que estaba cayendo duro y había niños. Venga… os lo compro. Aunque a regañadientes.

Lo de después fue peor porque se suspendieron que no cancelaron -hay una diferencia importante- las actuaciones programadas en las plazas del Padre Vallet y Coronación. Se estaba quedando mala noche y Abraham Mateo era la única alternativa. Aunque su ritmo latino coreografiado no es del gusto de todos y un gran porcentaje de jóvenes confiaban en poder entrar a la carpa cuando acabase el concierto. Para disfrutar con los temas del pinchadiscos. Los que se saben de memoria, los que bailan, los que se merecen porque… las Fiestas Patronales son, sobre todo, para ellos. Pero no lo tuvieron fácil y muchos no lo consiguieron. Los antidisturbios trataron de poner paz pero, a juzgar por los mensajes que he recibido estos días, yo diría que tampoco lograron su objetivo.

La siguiente oportunidad era después del concierto de Taburete que estaba a reventar a pesar de ser el único de pago. Para pago el que se llevaron los madrileños; más de 130.000 euros y un cóctel para compartir con sus allegados. A costa de nuestro bolsillo. Quizás por eso no se han recibido las transferencias de las becas de comedor o no se ha dado salida a pequeños recibos pendientes en el cajón. Que de los 10 millones de euros en facturas sin cobrar prefiero no pronunciarme. Esa noche de lunes fue mucho más conflictiva y una salió por patas después del directo de los del caché por las nubes. Que, por supuesto, pueden presupuestar lo que quieran. Aunque ante el vicio de pedir…

Los que se conformaron con mucho menos fueron los del Pop Tour aunque sólo Joaquín Padilla pudo cantar sus canciones. Justo cuando iban a subir al escenario los chicos de Tenneesse comenzó a llover y después a caer bolas de granizo del tamaño de garbanzos. Me había cruzado con Santi de Inhumanos cerca de los camerinos y aproveché para saludarle pero a Bernárdez ni siquiera tuve ocasión de verle. Nos mojamos casi todos aunque los equipos técnicos se llevaron la peor parte. El desenlace estaba claro cuando la concejal de Festejos, Macarena Lora, subió al escenario con un megáfono y los periodistas recibimos un urgente del Gabinete de Prensa anunciando la suspensión de los conciertos. Poco después, miembros de Protección Civil y Policía Municipal valoraron los daños in situ y tomaron fotografías. Dicen los responsables de Estudio 13 que hasta esa noche nunca habían tenido que suspender un espectáculo. Vaya por Dios Señor.

El caso es que dejó de llover y los de la EGB -esos que hace tiempo perdimos el Norte– decidimos quedarnos a buscar conocidos y a saludar. Eso evitó males mayores. Sobre todo a los que estaban a pie de barra y chiringuito. Ya era sábado; el día de la Fiesta Rociera, del Concurso de Recortes y de los fuegos artificiales aplazados. Que pocos vieron -algunos los confundieron con truenos- y que fueron espectaculares. En los tres puntos de la ciudad descargó como si no hubiera un mañana.

Pero lo hay. El 7 de septiembre de 2024. Para entonces, alguien debería intentar que llueva si no a gusto de todos por lo menos de la mayoría. O trazar un plan alternativo para que la climatología y otras circunstancias no mojen la alegría.

Tan necesaria en tiempos grises y revueltos.

Asunción Mateos Villar
Fotografías: Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón

(*) Datos de lluvia en Pozuelo de Alarcón proporcionados por Raúl Martín y recogidos en su Estación Meteorológica situada a pocos metros del Ayuntamiento. El día 2 de septiembre se recogieron 18,6 litros por metro cuadrado, el 3 de septiembre 39,2 litros por metro cuadrado, el 4 de septiembre 36,6 litros por metro cuadrado, el 8 de septiembre 3,6 litros por metro cuadrado y el 9 de septiembre 6 litros por metro cuadrado. En total fueron unos 106 litros por metros cuadrado cuando lo normal es que, de media, caigan en todo el mes de septiembre 28,3 litros por metro cuadrado.

La Alcaldesa, Paloma Tejero, y representantes de la peña taurina Seis y Medio

Abraham Mateo en Pozuelo de Alarcón

Taburete tras el concierto en la carpa

Paloma Tejero, y la concejal de Festejos, Macarena Lora en la Ofrenda Floral

La primera vela de la regidora en el Pobre de Mí tuvo que ser en la capilla

De paraguas y fuegos artificiales